El objetivo de esta campaña es alertar sobre esta causa de exclusión de la comunidad, llamar la atención a la sociedad hacia esta discriminación y lograr activar a las personas que actualmente sufren esa soledad obligada de forma que puedan participar nuevamente en la sociedad.

 

 

La campaña ‘SOS SOLEDAD, yo también cuento’, enmarcada en la estrategia de contestación activa ‘SOS DISCAPACIDAD’ del CERMI, se desarrolla gracias a una subvención procedente del 0,7% del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.

 

Como indica el Comité, “con esta campaña queremos contribuir a paliar esta lacra social con diferentes soluciones de acompañamiento y empoderamiento en esferas de la vida cotidiana de las personas mayores con discapacidad, que potencian a su vez el voluntariado activo de las personas con discapacidad, con un enfoque colaborativo intergeneracional y utilizando las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) digitales”.

 

Además, continúa el CERMI, “la discapacidad tiene rostro de mujer, razón por la cual las mujeres con discapacidad mayores ocupan un espacio protagonista en esta campaña”.

 

Concretamente, la campaña se desarrollará a lo largo del presente 2020 en torno a cinco puntos que afectan de manera significativa a las personas mayores con discapacidad que sufren soledad no deseada: ‘SOS SOLEDAD en compañía’, que abordará la violencia contra las mujeres con discapacidad en instituciones; ‘SOS SOLEDAD, tejiendo hilos en Twitter, tejiendo hilos que unen’, sobre las TIC digitales como elemento de participación activa en la sociedad; ‘SOS SOLEDAD, solo quedamos nosotras’, sobre las mujeres con discapacidad ante la despoblación del mundo rural; ‘SOS SOLEDAD, selfies sobre huellas de vida’; y ‘SOS SOLEDAD, voces contra el silencio’, con historias de radio a través de podcast de inclusión’.